La actual Plaza de la Constitución es, históricamente, la plaza más antigua de Alzira. Su origen se remonta a la misma fundación de la ciudad, cuando ésta era una pequeña isla en el curso bajo del río Júcar, poblada y amurallada, en la Edad Media. Este lugar céntrico de la primitiva ciudad, hoy desplazado por el crecimiento urbano a un sector más periférico que entonces, tomó durante siglos la función de ser la plaza mayor o central del municipio. Debido a que era la plaza situada ante la fachada principal de la primera parroquia del municipio, la iglesia de Santa Catalina, su primer nombre conocido fue Plateam Sancte Catherine. Después se la denominó durante siglos como Plaza Mayor, y también como Plaza Real, Plaza dels Porxets y también Plaza de Fernando e Isabel. En la segunda mitad del siglo XIX, con motivo de la restauración de la monarquía borbónica en 1874, se la denominó Plaza de Alfonso XII.
Plaza de Alfonso XII, 1905 |
Durante la Segunda República (1931-1936) la plaza fue bautizada con ese mismo nombre, Plaza de la República, y después tras la llegada del franquismo de nuevo se la denominó Plaza de los Mártires, y se instaló en ella un monumento franquista en honor de los caídos por el bando nacional.
Monumento a los Caídos por España, 1960 |
Tras la llegada de la democracia española el monumento franquista fue remodelado y sus connotaciones políticas fueron sustituidas por un monumento a la Constitución. Desde entonces y hasta hoy su nombre es Plaza de la Constitución. A pesar de lo anterior desde siempre la población de Alzira se suele referir a esta plaza con el nombre de la iglesia católica que existe en ella desde hace siglos, por lo que se la conoce con el nombre de Plaza de Santa Catalina, aunque oficialmente nunca ha tenido ese nombre.
Plaza de la Constitución, fuente y jardín, 19 de marzo de 2023 |
La historia de Alzira, y de las personas que participaron en ella públicamente, está muy vinculada a esta plaza que hoy es un espacio central del barrio de la Vila. En esta plaza estuvieron o están todavía las casas que fueron vivienda de las familias más importantes del municipio durante el siglo XIX y principios del XX, muchas de las cuales son objeto de interés en este blog. Así, la familia Pardo, Bolea, Bono, Estaña-Galvañón, Cucó, y otras. Los historiadores Pagán y Lairón (2000: 178) señalan que es en esta época cuando se edifican las viviendas más monumentales que conocemos:
"La prosperitat econòmica va dur també amb ella nous hàbits de vida en una societat que reclamava més centres comercials i d’oci, així com un interés per les activitats culturals. Els més rics farien ostentació del seu poder edificant cases, i també magatzems, d’estil modernista dels que encara hui tenim bones mostres a la plaça de la Constitució o als carrers de Faustino Blasco o Pérez Galdós".
En palabras de Pagán y Lairón (2000: 181): "La plaça d’Alfons XII, presidida per l’església de Santa Caterina, es trobava envoltada de grans cases alçades a finals del segle XIX i principis del XX, pertanyents a les famílies més adinerades com la d’Andrónico Cucó, Juan Pardo Sánchez, Ramón Simarro (notari), Bernardo Andrés i Maria Colom, la família Oria i la ja desapareguda Casa Bolea. La proximitat dels Jutjats (Plaza Cassasús) i del Registre de la Propietat, explica que a Alfons XII estigueren dues de les quatre notaries (Ramón Simarro i Enrique Serrano) i que les altres dues no estigueren molt lluny: Claudio Miralles (Llotja) i Ignacio Ceballos (Pl. Castelar). A la plaça Castelar s’aglutinaven els bufets d’advocats (Calot, Cerdà, Llinares, Marco Sifre, Vicente Rosario) que s’estenien també pels carrers veïns, com el de Cànoves (Rodolfo Clari) i a l’altre costat del pont per Santa Caterina (Juan Redal), Santa Teresa (Lluís Rosario), Costa (Miquel Dolç) i Empar (José Moscardó)".
Base de columna, ruina gótica del Almudín medieval |
Al menos desde el siglo XIX se celebraba en esta plaza, los miércoles por la mañana, el Mercado de alimentación: frutas, verduras y hortalizas, carnes y pescados, y otros productos locales, se vendían a las amas de casa, criadas y compradores venidos de pueblos cercanos con ocasión de este día. Historiadores alzireños (Pagán y Lairón, 2020: 125 y 171) señalan que ya desde 1350 aproximadamente y hasta su demolición en 1898, existió un almacén de grano o almodín, dotado de cinco arcos góticos, en el actual centro de la plaza de la Constitución. Es posible que en ese momento se desarrollase la costumbre de celebrar allí el mercado, y que tras la desaparición de las ruinas de este edificio, se mantuviese esa costumbre. Afirman estos autores:
"A mitjans del segle XIV degué construir-se un nou almodí o magatzem de gra enfront de la porta de l’església de Santa Caterina, on hui trobem la plaça de la Constitució, i que segons José Mª Parra, degué ser el mateix edifici que convertit en llotja i suportat a cinc arcades gòtiques va substituir fins a l’any 1898 en què va ser esfondrat, encara que un dels seus arcs encara és visible a l’anomenada casa d’Enrique Oria".
Excavación arqueológica del almodín de la Plaza de la Constitución, 2009 |
Además: "Dit pòrtic presentava tres arcs frontals recaients a la Plaça, en un ample de vint metres de façana i dos arcs per cada costat, de nou metres de fons cadascun. En l’enderroc un veí va recuperar una basa de columna la qual es conserva en la mateixa plaça. Es te constància que en l’any 1474 els jurats contracten a dos mestres d’obres de València per a que supervisen l’es ".tat de la construcció, resultant que era ben feta exceptuant dos arcs: “... lo arc que esta o mira vers la peixcateria (cara sud) i el altre endret aquell que mira vers la plaça, los quals es menester sien enderrocats e novament tornar a fer e construir”. Les obres es realitzaren per parts, una en 1516 i altra en 1537".
Fruto de estas excavaciones arqueológicas se localizaron diversos elementos de interés que evidencian la existencia del Almodín medieval en esta plaza: "En el subsòl, a més de les estructures dels immobles desapareguts, alguns paviments i canalitzacions, vam traure unes gerres alineades ocupant una gran extensió. La funció seria per a emmagatzemar productes (grans o líquids), depòsits que tindrien relació amb la proximitat de l’antic edifici de l‘Almodí i el fet de celebrar antigament el tradicional mercat setmanal en la Plaça". El día 14 de noviembre de 2009 el periódico Las Provincias publicó:
"En 1378 Pere IV [Pedro IV de Aragón, el Ceremonioso o el del Punyalet (1319-1387)] rubricaba en Menorca un pergamino que hacía alusión al almudín de Alzira. Y es que la vieja isla del Júcar, fortificada y rodeada por las murallas y el río, era uno de los emporios comerciales más importantes del antiguo Reino de Valencia. La documentación escrita y algunos planos hablan de varios mercados y ahora, con las excavaciones que se están realizando en la plaza de la Constitución para peatonalizar la zona, ha salido a la luz lo que posiblemente era una de las estructuras del almudín, un edificio comercial de la época medieval de planta rectangular".
Ubicación del antiguo Mercado Municipal, hoy murallas y Falla El Mercat, 19 de marzo de 2023 |
Este mercado se celebraba en esta plaza al margen del mercado diario o Mercado Municipal, que ocupaba el sur de la Vila, en la actual Plaza del Mercado (Plaça del Mercat). Ya en la década de 1980, con la urbanización de la actual calle Pere Morell, al sur de la población actual, se trasladó este mercado ambulante de los miércoles a su actual ubicación.
Plaza de Alfonso XII y mercado de los miércoles hacia 1920 |
El investigador alzireño Alfonso Rovira (2000: 154) sitúa en esta plaza, en un edificio todavía hoy en pie, aunque deshabitado y en venta, la vivienda de la familia Pardo-Sánchez. La familia Pardo, a quien hemos dedicado una entrada en este blog, fue una familia fundamental en la vida pública no solo de Alzira, sino de la comarca y de Valencia, desde finales del siglo XIX hasta la Guerra Civil y hoy está totalmente olvidada sin que el nombre de una calle o un monumento den memoria de su pasado. Los Pardo instalaron la electricidad en Alzira en el año 1900 y durante los años previos a la Guerra Civil ocuparon cargos políticos en el Ayuntamiento de Alzira, tanto como concejales como en la alcaldía.
Casa Pardo, marzo 2023 |
Tras la Guerra Civil y la desaparición de los Pardo en Alzira -los supervivientes permanecieron en Valencia, donde hoy residen sus descendientes- y ya con la llegada del franquismo (1939-1975) se instaló en la antigua casa de los Pardo las oficinas de Correos, a cargo primero de Emerano Gil Porcar y de Rodolfo Carrión Terol después. Posteriormente la oficina de Correos se trasladó a su ubicación actual, en la Avenida Santos Patronos.
Muy próxima a la plaza (hoy integrada en ella) se encontraba la Casa Bono, que permanece en pie a pesar del tiempo. A finales de 2022 se iniciaron trabajos de remodelación integral tanto de su fachada como de su interior.
Fachada de la Casa Bono, 2019, antes de su remodelación |
La familia Bono fue propietaria de tierras en el municipio, dedicadas al cultivo de la naranja, y sus miembros se dedicaron a la abogacía y la política, ocupando la alcaldía a principios del siglo XX. La Casa Bono muestra un estilo arquitectónico ecléctico: elementos clásicos y modernistas o neogóticos combinados entre sí. Su construcción original se remonta a 1850 y fue reformada en 1907, fecha en que adquirió el aspecto que conserva hoy y vemos en las fotografías. Sus primeros propietarios fueron los Galvañón. De esta familia destacaron el empresario alzireño Ramón Galvañón Riberoles, el diputado del partido conservador entre 1905 y 1910, Ramón Galvañón Dufaur, y el concejal del partido conservador en el Ayuntamiento de Alzira durante la década de 1920, Eduardo Galvañón Solanich. Eran propietarios del Huerto de Galvañón, al que tenemos dedicada una entrada en este blog.
En fecha incierta la casa fue adquirida por la familia Bono, de la cual tomó su actual nombre. De esta familia destacó Eduardo Bono Sifre, abogado con despacho en la plaza de Castelar (actual plaza Mayor en 1914, y alcalde del Ayuntamiento en 1916-1917 por el partido liberal. Cesó en el cargo el 23 de junio de 1917, en medio de la crisis económica y social de aquel año, siendo sustituido por el abogado Luis Rosario Vilá (1917-1919).
También estaba su hermano, Emilio Bono Sifre, que era también concejal por el partido Liberal y jefe local de dicho partido así como del Círculo Liberal Alcireño, con setecientos socios en 1914. Fue nombrado alcalde de la ciudad por la Real Orden de 26 de noviembre de 1911, iniciando su mandato el 1 de enero de 1912 y cesó el 22 de noviembre de 1913. Había una tercera hermana, Rosa Bono Sifre, que en 1917 era la presidenta de la Asociación de Nuestra Señora de los Desamparados, y que según consta en las actas municipales (30 de julio de 1917), solicitó y obtuvo del Ayuntamiento un donativo para que esta asociación instalase en la plaza de Castelar, durante las fiestas patronales, una tómbola benéfica.
Casa Bolea tras el incendio, 19 de septiembre de 1911 |
Otra familia destacada a principios del siglo XX fue la del diputado y alcalde por el Partido Conservador, José Bolea Villanueva. Fue alcalde de la ciudad en dos ocasiones (1903-1905 y 1907-1909). Después fue nombrado diputado provincial, cargo que ocupó entre 1911 y hasta su muerte en noviembre de 1920. En el año 1916 aparece su nombre en el listado de mayores contribuyentes de la ciudad y también como miembro de la Junta de Socorros que se constituyó tras las inundaciones de noviembre de aquel año. También fue el jefe local en Alzira del Partido Conservador durante todos esos años.
El alcalde y diputado del Partido Conservador José Bolea Villanueva fue padre del escritor y periodista José Bolea Gorgonio (1903-1988), que tras militar en el Partido Republicano y apoyar a la II República durante la Guerra Civil, se exilió a México con la llegada de Franco al poder, donde desarrolló su carrera literaria y moriría.
El escritor José Bolea Gorgonio (Josep Alcira), hacia 1943, ya en el exilio. |
Su casa, llamativa y ostentosa, hoy no existe y en su lugar se alza el jardín arbolado de la plaza, pues en su momento ocupaba la primera de las viviendas de una manzana que tras la Guerra Civil se convirtió en un solar y permitió agrandar la planta de la plaza. El alcalde Bolea gobernaba la ciudad el 10 de septiembre de 1911, cuando una huelga obrera que se dejó sentir en Alzira y muy especialmente en Sueca y Cullera, terminó con el asalto violento de la población a la casa del antiguo alcalde, su saqueo e incendio. También fue incendiado el Casino Conservador, de la Plaza de Castelar (actual Plaza Mayor) en esos días de desórdenes.
Casa del ex alcalde José Bolea Villanueva, tras el incendio de septiembre de 1911 |
En la fotografía anterior, publicada en prensa tras los sucesos, se lee el siguiente texto: "Casa del ex alcalde conservador de Alcira Don José Bolea, que asaltaron los revoltosos, quemando todos los muebles y enseres que en ella había". Durante esos días se produjo un accidente. Cuando los huelguistas enfurecidos lanzaron un piano desde el salón del primer piso, el instrumento cayó sobre un niño de diez años que resultó aplastado y falleció en el acto.
En la Casa Bolea se instaló la Casa Cuartel de la Guardia Civil al terminar la Guerra Civil (1936-1939), de forma temporal, hasta que el 18 de julio de 1958 se inauguró el edificio que ocupa actualmente esas viviendas militares, regresando a su emplazamiento original a orillas del río, junto al puente de hierro.
Iglesia de Santa Catalina hacia 1940. A la derecha, balcón de la Casa Bolea, hoy desaparecida |
Sin uso ya desde ese momento, pues los descendientes de la familia Bolea no vivían en Alzira, la vivienda fue demolida en la década de 1960 y también toda la manzana central de casas, lo que permitió el ensanche de esta plaza. En el solar se plantaron dos árboles y se erigió una estela conmemorativa de la muerte del rey de Aragón, Jaime I el Conquistador (1208-1276), que falleció en Alzira tras la reconquista a los musulmanes.
Monumento a Jaime I en el solar de la Casa Bolea, julio de 1974 |
Los dos árboles que decoran y dan sombra a la plaza de la Constitución pertenecen a la especie Tipuana tipu, originaria de Argentina, y el más grande de ellos está protegido e inscrito en el Catálogo de Árboles Monumentales y Singulares de la Comunidad Valenciana (15 de enero de 2020). Su tronco mide más de dos metros y medio de diámetro y sus ramas alcanzan una altura de veinte metros.
Árbol que ocupa el solar de la Casa Bolea (fotografía de Susana Gallego Martínez, julio 2021) |
En esta plaza se ubicó también la escuela de educación infantil de la maestra Justa Estellés. También destacaron comercios muy concurridos que hoy están cerrados: la tienda de dulces y caramelos de Francisco Sánchez Aranda, la imprenta papelería de Rosa Llinares, viuda de Cipriano Cardona, y las notarías de Enrique Serrano y Eusebio Giles de la Riestra.
La plaza ha sido siempre un eje comercial importante en el municipio. La droguería perfumería que aparece en esta imagen, de alrededor de 1980, es hoy la farmacia de Bertomeu Pérez, en el número 7 de la plaza.
Comercios de la Plaza de la Constitución, 1980 |
Comercios de la Plaza de la Constitución, 2023 |
Plaza de la Constitución, Alzira (Google Earth, 2022) |
Fachada de la iglesia de Santa Catalina, 23 de enero de 1971 |
Iglesia de Santa Catalina, 23 de enero de 1971 |
Plaza de la Constitución, 15 de febrero de 1989 |
En estas fotografías vemos la plaza en el año 2008, antes de su completa peatonalización, que eliminó tanto el tráfico como la zona de aparcamiento que circundaba el árbol.
Plaza de la Constitución, julio de 2008 |
En el año 2009 la plaza de la Constitución fue sometida a una remodelación integral para peatonalizarla. Fue durante el transcurso de estos trabajos que se descubrieron los restos arqueológicos del Almodín medieval, enterrado en la plaza. El periódico Las Provincias publicó la noticia el 14 de noviembre de 2009 con el titular: "Alzira saca a la luz un mercado medieval". Sobre las ruinas medievales el Ayuntamiento que entonces gobernaba el Partido Popular decidió instalar una fuente pública, de modo que a día de hoy no existe ninguna señalización o panel informativo que aluda a este hecho histórico, prácticamente ignorado.
Las Provincias, 14 de noviembre de 2009 |
Las obras se demoraron más de un año y a principios de 2011 quedaron terminadas.
Obras de peatonalización, marzo 2010 |
El aspecto actual de la plaza dista mucho de las calles abarrotadas de vehículos de antaño. Hoy es un espacio verde, sombreado, apto para paseos agradables y celebraciones populares.
Plaza de la Constitución, 2021 |
Fuentes:
Alba Pagán, Ester; Lairón Pla, Aureliano J. (2020). Història d'Alzira. Des de la Prehistòria fis a l'actualitat (Volumen 1). Universitat de València. ISBN 978-84-9133-291-6.
Alba Pagán, Ester; Lairón Pla, Aureliano J. (2020). Història d'Alzira. Geografía física y humana, arte y patrimonio cultural (Volumen 2). Universitat de València. ISBN 978-84-9133-291-6.
Rovira Marín, Alfonso (2000). Alzira, memoria gráfica del siglo XX, Vol. 1. Comissió Falla Camí-Nou. V-4819-2000.
Manuscrito (mecanografiado) titulado "Geografia Médica de Alcira", del autor Enrique Badenes Gallach (Cuenca, 1890 - València, 1946). Esta obra puede consultarse en los archivos de la Biblioteca y Archivo de la Real Academia Nacional de Medicina de España. Disponible en: http://bibliotecavirtual.ranm.es/ranm/es/consulta/registro.cmd?id=93 (consultado en abril de 2021). La obra fue reeditada en 2017 por Aureliano Lairón y Carmel Ferragud, publicada por la Institución Alfons el Magnànim-Centre Valencià d’Estudis i d’Investigació (el Magnànim), entidad cultural de la Diputación de Valencia. ISBN: 978-84-7822-745-7.
Mapas, vistas aéreas y vistas satélite: Capturas de vistas satélite de Google Earth entre 1985 y 2022. El resto de mapas (1905-2022) proceden de la Cartoteca del Instituto Geográfico Nacional de España: Disponibles en: https://www.ign.es/web/mapasantiguos/index.html. Las Planimetrías son documentos manuscritos realizados entre 1870 y 1950, a escala 1:25.000, que contienen información planimétrica y son los trabajos previos a la realización del Mapa Topográfico Nacional (MTN). La Planimetría está fechada en 1905. El mapa MTN50 1Edi está fechado en 1953. El mapa MTN25 1Edi, de escala 1:25.000, está fechado en 1970. La vista aérea de 1956 fue realizada por la Army Map Service del ejército estadounidense sobre España.
Colección completa de los ejemplares de la guía comercial o Almanaque Bailly-Bailliere (de 1895 a 1937), digitalizada por la Biblioteca Nacional de España. Se publicó en Madrid ininterrumpidamente desde 1848 hasta 1978. Disponible en: http://hemerotecadigital.bne.es/details.vm?q=id:0001128190&lang=es (Consultado el 29 de mayo de 2022).
Manuscrito (mecanografiado) titulado "Alcira", del autor Mario Guillamón Vidal (Alzira, 1924 - Alzira, 1990), realizado entre 1958 y 1989, con 115 fotografías de ese periodo. Esta obra puede consultarse en la Biblioteca Valenciana, Col.lecció: BV Fondo gráfico (Ubicación: BMAG, Signatura: F332/1-126, Código de barras: 641249. Disponible en: https://bivaldi.gva.es/va/consulta/resultados_ocr.do?id=2332&forma=ficha&tipoResultados=BIB&posicion=6 (consultado en marzo de 2022).